Por: Junior Santana. – El PLD, circunstancias al margen, continúa en una posición privilegiada, constituyéndose como marco referencial de los partidos y agrupaciones políticas en la República Dominicana. Nadie, ni siquiera los más acérrimos detractores agazapados en la oposición, pone en duda que el Partido de la Liberación Dominicana conserve su primacía en la gracia del favor electoral y en la buena voluntad del pueblo. Los acontecimientos históricos recientes aún permanecen frescos en la memoria de esta generación que ha visto con sus propias pupilas como el país ha crecido transformándose en un estado más democrático, plural y solidario.
El partido de Bosch no debe perder el norte, no puede ser su fin último la consecución de otra victoria electoral consecutiva tras un vacuo argumento como “permanecer en el poder”, recordemos que en su declaración de principios «El PLD se constituye como una respuesta a la realidad económica, social y política de la República Dominicana», así que la discusión debería liberarse un poco de tintes electorales y orientarse más en cómo vamos a continuar la obra del presidente Danilo Medina.
Dada su cómoda primacía en el favor de los electores, planteada en el primer párrafo, el problema del PLD no pasa por ser un asunto electoral, entonces el partido debería de preocuparse más en este momento por la garantía de continuidad en la construcción acelerada de aulas y en la expansión de la tanda extendida antes que discutir sobre quién es el candidato favorito entre hombres de 35 a 45 años en la zona urbana de la provincia tal. Para el PLD tiene que ser más importante asegurar que se siga aumentando la cobertura del seguro de salud de los dominicanos, ya sobre un 76% antes que cavilar acerca de si una firma encuestadora es más certera que la otra.
A los que difieran con relación a que el partido se debe concentrar en continuar un buen gobierno antes que aglutinarse tras la mecánica de lo electoral, les recuerdo que en todo caso el éxito en las urnas en 2020 dependerá de la gestión del presidente Medina, sin importar mucho quién ocupe la candidatura en la boleta morada, la mejor estrategia seguirá siendo un gobierno cercano a la gente.
Es por ello que nuestro candidato, Rhadamés Segura, se ha concentrado en propagar un discurso cimentado en el buen gobernar, en tratar y debatir cada punto neurálgico del complejo tablero nacional, en aportar ideas y soluciones, en identificar con precisión los grandes aciertos de esta gestión de gobierno, logrando congregar un volumen significativo de los dirigentes que componen las estructuras orgánicas más firmes que conforman el PLD. Rhadamés trabaja para construir un proyecto político sólido, que no sea una casa de papel, ni de cartón, o una estéril actividad multitudinaria de dos horas donde se dilapidan recursos sin necesidad y a veces hasta sin decoro.
El 2020 se acerca, el PLD debe de aprender, una vez y por todas, que nada es más importante para su éxito, incluido el electoral, que continuar un buen gobierno, y nada más.
Autor: Junior Santana
