Ciertamente en política hemos visto de todo y sabemos que hay momentos donde el dicho de que perdiendo se gana encaja bien para algunos candidatos; tal es el caso de Pascal Núñez, que sabe que no tiene ninguna posibilidad de ser alcalde -o suponemos que sabe-, pero gana de todas formas, pues al ser candidato presentado por un partido grande se da a conocer, midiéndose incluso con un candidato robusto como Kelvin Cruz. Esto hace que en él se aplique la frase de que perdiendo se gana; lo mismo podríamos decir de Demnis Marte, que, aunque es más conocido que Pascal, su figura hace mucho que no sonaba.
En el caso de Jhonny Motors el asunto es peor, ese sí que no tiene absolutamente nada que perder y todo por ganar, pues pasa de nunca haber sido candidato a nada, pues en el espectro político era un total desconocido, a candidato a senador del PLD, un título que sin duda le será de mucha ayuda en su curriculum para los próximos años.
¿Pero qué pasa con Euclides Sánchez, cuánto pierde el exsenador en una eventual derrota como pinta que puede pasar? Primero, al parecer Euclides depositó todas sus esperanzas en una alianza que, en La Vega, no cuajó. El PLD se va solo con un candidato que, de acuerdo a los números que manejamos, no tiene con qué ganar, pero sin lugar a dudas le saca de las urnas los votos a Euclides para dar una batalla digna en contra del senador Ramón Rogelio Genao.
Pero el mayor problema radica en que el PLD es un partido de verdad, aunque Jhonny no sea un candidato del peso de su partido, y hemos reiterado una y otra (y otra) vez que los senadores, diputados y regidores no calan en el sentir de la gente, no fanatizan, lo que provoca que el elemento estructural de los partidos sea determinante a la hora de escrutar esos votos, pues los militantes terminan votando por los suyos, y en La Vega el PLD aventaja a la Fuerza del Pueblo, lo que indica que Euclides no solo se arriesga a perder, sino también a quedar en un tercer lugar detrás de Jhonny Motors.
El exsenador pudiera estar cimentando sus esperanzas en el entendido de que los PRM no votarían por Genao, pero la pregunta sería ¿Por qué votarían por Euclides? ¿Qué los motiva, en que los beneficia, que ganarían con eso? Al final, el electorado no reconoce ni sabe cuál es la función de un legislador, entonces nos preguntamos cómo cayó Euclides en ese gancho, cuál fue el sueño que le vendieron o que pactó.
Veamos otro elemento importante en posiciones de poco interés para el elector como los legisladores: el aspecto económico ¿Cuánto estaría dispuesto a gastar Euclides de su patrimonio? Hace apenas unos días vi al exsenador en el Opening del baloncesto superior de La Vega, actividad que pasó el sin pena ni gloria, yo en su lugar no habría ido, pero ¿por qué pasa sin pena ni gloria?, simple, porque no aportó nada, ni a un equipo, ni al comité organizador, ni a las bandas ni a nadie, por eso no sonó ni va a sonar, del otro lado lo que se dice del gordito es que suele ser generoso con sus cercanos, que tiene coco para gastar y que no le para bola a nada. Entonces es válido preguntar, quién patrocinará a Euclides. Enriquito que no quiere saber de él y en esta ocasión con boletas separadas los votos de Gilda no se le suman ¿Quién más pudiera aportar en La Fuerza del Pueblo? Sencillamente está solo, solo y desamparado, pues a Leonel mejor hay que darle.
Confieso que he sido objeto de muchos ataques feroces por estar dando consejo que nadie me ha pedido, pero a los amigos se le dice la verdad aunque les duela y como Euclides es mi amigo, le daré el mismo consejo que le di a José Ángel Tavárez: deje esa vaina que usted tiene demasiado que perder, para el 2020 todo el mundo entiende que la “ola en contra del PLD” se lo llevó con rana, y que usted perdió por unas condiciones que usted no podía controlar, sin embargo, ahora el asunto es diferente y esta eventual derrota no solo pondrá en entredicho su liderazgo, sino también que su valor en el mercado político que estará por debajo del de Jhonny Motors. Correr a tiempo nunca será de cobardes.
Félix Lantigua.
